En la mayoría de los casos, las primeras obras suelen estar inspiradas por elementos cercanos, quizás por eso, las rosas sean las flores más retratadas por la mayoría de pintores noveles.
Pero cuando no se es capaz de trasladar al lienzo aquello que se pretende, llega la frustración, y esto ocurre, generalmente, por no dominar o conocer en profundidad la técnica. Saber cómo pintar rosas al óleo no es difícil, pero requiere práctica y unos conocimientos básicos.
El primer paso será dibujar la forma básica de nuestra rosa sobre el lienzo a la vez que preparamos las pinturas elegidas para darle color. A continuación, cogeremos un pincel angular suavemente, como si fuera un lápiz o un bolígrafo, e introducimos su punta en la mezcla de color que hemos elegido para la rosa.
Comenzando desde el centro vamos dándole color a nuestra flor. Rellenamos el fondo sin preocuparnos de las luces, las sombras o las formas, los detalles ya llegarán cuando pintemos los pétalos. Para ello, mezclamos una pizca de negro al color que hemos usado como fondo y procedemos a aplicar la nueva tonalidad con un trazo en forma de “C”.
Ese será nuestro primer pétalo.
Poco a poco vamos repitiendo la operación y creamos más pétalos, que en sus extremos se irán superponiendo unos con otros. Al terminar con los pétalos, dejaremos secar la pintura durante varios días.
Una vez esté bien seca, retomaremos el trabajo mezclando los mismos colores, aunque esta vez usaremos tonalidades más ligeras para las zonas más iluminadas de la rosa y otros tonos más oscuros para agregar sombras. Así, vamos añadiendo los destellos de luz en nuestra flor y remarcamos las zonas entre los pétalos añadiéndoles toques sombreados.
Terminada la flor llega el momento de pintar las hojas y el tallo. Para ello usaremos pintura verde oliva mezclada a partes iguales con sepia, preocupándonos de usar un pincel algo más grueso para el tallo. Además, para mostrar el origen de la fuente de luz, agregaremos destellos blancos y sombras verde oscuro en hojas y tallo.
Dados estos últimos retoques, sólo restaría dejar secar nuestro cuadro al menos durante una semana.
Como puede comprobarse, la técnica que nos permitirá dominar cómo pintar rosas al óleo no es demasiado compleja, aunque sí algo laboriosa. Con paciencia y constancia, no hay ninguna razón para que en un tiempo relativamente breve, no puedas pintar rosas al óleo con resultados notables.